El cambio de lámparas incandescentes por lámparas de bajo consumo es una medida que permite ahorros importantes en muy corto plazo. Una meta de abandono de lámparas incandescentes como la que proponemos implica evitar la construcción de varias centrales eléctricas, ahorrar recursos no renovables y evitar la emisión de gases de efecto invernadero. El uso inteligente, no la privación, es la filosofía básica de la eficiencia energética.
Con las bombillas de bajo consumo todo son ventajas
Frente a las tradicionales bombillas incandescentes, las de nueva tecnología de bajo consumo tienen muchísimas ventajas:
- Son más eficientes. Reducen en un 80% la energía consumida por las tradicionales bombillas incandescentes.
- Son más económicas. Duran, como mínimo, 6 veces más que una bombilla tradicional y su coste se recupera en menos de 1 año.
- Son más ecológicas. Reducen sustancialmente las emisiones de CO2, que son nocivas para el medio ambiente.
Para bombillas de 8.000 horas y un precio del kWh en el hogar en torno a 0,17€,los ahorros serían los siguientes: | |||
ANTES | AHORA | AHORRAS | |
Bombilla incandescente | Bombillas de bajo consumo con igual intensidad de luz | Coste electricidad | |
40W | 9W | 42€ | |
60W | 11W | 67€ | |
75W | 15W | 82€ | |
100W | 20W | 109€ |
Cómo sacar el máximo rendimiento a las bombillas de bajo consumo
Es conveniente instalarlas en los puntos de iluminación del hogar con mayor número de horas de encendido al año. Ahorrarás más y la bombilla de bajo consumo te durará más.
Es aconsejable ponerlas en aquellas habitaciones de uso más continuado. El encendido y apagado frecuente de las bombillas de bajo consumo reduce su vida útil.
Elige la tonalidad de luz de la bombilla de bajo consumo de acuerdo a tus necesidades y gustos. Existe una amplia variedad de gamas.
El casquillo convencional que tienen las bombillas de bajo consumo permite su sustitución sin ningún problema.
Cuando termina su vida útil, deben ser recicladas. Entrégalas en su tienda habitual o deposítalas en un punto limpio.