¿Son seguros los suelos radiantes eléctricos?

No puede alcanzar una temperatura mayor de 28ºC y si se produce una inundación, se interrumpe automáticamente su funcionamiento y sólo hay que esperar a que se seque para ponerlo en marcha nuevamente. En el caso de que se derrame algún líquido en el suelo, no afecta al film radiante, que ueda protegido por el material que se coloca entre el film y la tarima flotante

¿En qué consiste suelo radiante eléctrico?

El suelo radiante eléctrico consiste en un films que se coloca sobre el suelo existente y sobre él se instala un suelo laminado o parqué, con sistema flotante. Los films están conectados, mediante cables, a una toma de corriente y a un termostato que permite regular la temperatura.

Es apto para cualquier estancia, salvo para los lugares húmedos.
Puedes utilizar cualquier suelo laminado o parqué que tenga estas características: entre 5-22 mm de espesor y con una resistencia térmica inferior a 0,18 m cuadrados/kW para que transmita bien el calor. El sistema debe ser flotante.
Se venden en pack y puedes instalarlo tú mismo, sin hacer obra, siguiendo las instrucciones y el video que incluye el fabricante.

Los toalleros eléctricos

En invierno, es una tarea díficill eso de dejar secar la toalla húmeda. Por eso, para que el aseo diario sea más confortable, es recomendable colocar un toallero eléctrico o de agua en etu cuarto de baño. Además de ser muy prácticos, son originales y decoran el baño.

Ahorra energía gracias a bajo puertas y burletes

Los bajo puertas y burletes son cintas de silicona y otros materiales que se ponen en bordes de ventanas y puertas para evitar la entrada y salida de aire. Contribuyen a aislar las viviendas y con ellas puedes ahorrar hasta un 35 por ciento de energía. Recuerda que es más barato aislar que subir o bajar un grado en la calefacción o climatización.

Ahorrar energía gracias a las persianas inteligentes

Las persianas automatizadas con función solar/crepuscular permiten ahorrar energía durante todo el año. En verano se cierran cuando les da el sol, reduciendo el gasto en aire acondicionado; en invierno, se cierran al anochecer, para mejorar el aislamiento térmico de la casa y ahorrar en calefacción.