En los
sistemas solares forzados, el fluido caloportador contenido en el colector solar fluye por efecto del empuje de un grupo de bombeo hacia el acumulador. Un termostato diferencial ( o centralita), a través de dos sondas, chequea continuamente la temperatura de los captadores y la del acumulador: cuando éste demanda temperatura de los captadores, la sonda envía una señal a la centralita.
Son
estéticos, ya que el depósito no se coloca en el tejado, sino en el garaje o en el trastero. Son más
versátiles, ya que como tiene capacidad para unos 3.000 l., es capaz de ofrecer otras aplicaciones, aparte de la producción de agua caliente, como la calefacción o la elevación de la temperatura del agua de la piscina.. Son más caros que los compactos, a partir de los 2.500 euros.