Ventajas y desventajas de la lavasecadora

La lavasecadora es un electrodoméstico que reúne en un solo aparato una lavadora y una secadora. Puede ser la solución más apropiada cuando necesita secar la ropa con rapidez y siempre que tenga falta de espacio. Pero piénselo bien, porque su precio es alto, en torno a 700 euros.
Como muchas lavadoras son capaces de lavar entre 2,5 kg de ropa sintética y 6 kg de algodón, pero secan algunos kilos menos, entre 1,5 de sintética y 4 kg de algodón. Por eso, si decide poner un programa completo de lavado y secado, no podrá llenar la máquina hasta su máxima capacidad.

Puede funcionar por separado como lavadora y como secadora y también de manera conjunta.
Como lavadora es definitivamente más eficaz que como secadora. Cuando se utiliza como lavasecadora su eficacia disminuye notablemente. Se necesitan dos ciclos de secado para secar una carga completa de ropa lavada, con su consiguiente gasto de energía, tiempo y dinero.

Tardan mucho en secar la ropa y, desde luego, más que una secadora. La explicación parece estar en el tamaño del tambor de las secadoras que suele ser mayor.
Las lavasecadoras, en general, hacen mucho ruido. Y este es un aspecto muy importante, sobre todo, para los usuarios de tarifa nocturna, que utilizan este tipo de aparatos por la noche.

La mejor solución para protegerse contra los daños por agua es un sistema de aquastop y un flotador, pero no suelen ser habituales ni en las lavadoras ni en las lavasecadoras. Cierto es que los desbordamientos no son muy frecuentes, pero cuando se producen, los daños suelen ser cuantiosos.

Cosas que debemos tener en cuenta a la hora de comprar un congelador

1. El consumo La categoría energética del aparato es un elemento a tener en cuenta para ahorrar energía. La etiqueta Eurolabel abarca una escala desde la letra A (económico) hasta la letra G (poco económico). Esta está presente en cada modelo de la exposición e indica el grado de consumo de energía.

2. La capa aislante Con unas paredes más espesas, esta capa aislante reforzada ofrece dos ventajas: Ahorro de electricidad en torno al 50%. Los alimentos se conservan el doble de tiempo en caso de apagón.

3. La autonomía Indica el tiempo en el que los alimentos congelados se conservan en caso de apagón. Varía desde 10 hasta 62 horas según el volumen y el espesor del aislante del modelo.

4.  El indicador de congelación Es el marcador de tu congelador. Indica el peso de carne de ternera (el alimento más difícil de congelar) que tu aparato puede congelar en 24 horas a –18ºC. Hay que tenerlo en cuenta si se desean congelar grandes cantidades de productos frescos o platos cocidos.

5. El frío ventilado Confort máximo, presenta ventajas prácticas: Reparte uniformemente el frío por todo el congelador. Acaba totalmente con la tarea de descongelación. Los alimentos no se pegan entre ellos y las etiquetas permanecen legibles.

Recomendaciones de uso de un congelador

- Cuando la escacha llega a un espesor de 3 mm. debes descongelar aparato. Más allá de 6 mm. la escarcha crea una capa que puede provocar un aumento del consumo de un 30%. Para acelerar el descongelado, puedes poner un recipiente con agua caliente dentro del aparato.

- Limpia las paredes exteriores con productos específicos no abrasivos. El interior tiene que limpiarse regularmente. Cuando lo descongeles limpia las paredes interiores con zumo de limón para eliminar los olores.

- Las juntas de impermeabilidad son muy importantes para conservar el frío y ahorrar energía. Para verificar la impermeabilidad de tu congelador: cierra la puerta sobre una hoja de papel e intenta quitarla. Si la hoja se quita fácilmente, necesitas cambiar la puerta.

- Compra tus productos congelados lo último, transportándolos en una bolsa isotérmica. Esto permite protegerlos del calor, hasta que los pongas en el congelador.

Cómo evitar detalles diarios que incrementan la factura de la luz

Algunas situaciones que se repiten a diario incrementan el coste del recibo de la luz. Estas son algunas de ellas que se pueden evitar:
-La televisión se puede ver a oscuras en la sala de estar, si no se desarrolla otra actividad más.
-Apagar las luces que no se usen.
-Encender la luz de casa sólo cuando oscurezca, no cuando empiece a caer la tarde. Al atardecer, la luz natural se reduce, pero basta para realizar la mayoría de las tareas. 
-Abrir bien las persianas, antes que encender las luces de un cuarto.
-El mejor modo de aprovechar el frigorífico, lavadora y lavavajillas (y de que consuman menos) es utilizarlos a plena carga y, cuando sea posible, usar los programas económicos.
-Racionalizar el uso de los pequeños electrodomésticos, como el secador de pelo o la aspiradora, pues son grandes consumidores.

Regular la temperatura del aire acondicionado

El regular la temperatura de la estancia, y dejarla entre los 22º C y los 25º C, permite no desgastar demás el aparato y el ahorro que con ello conlleva. A medida que se incremente la humedad en el ambiente, deberán bajar la temperatura para poder mantener una similar sensación térmica. Se recomienda una temperatura para el verano de 25º C. Según estimaciones, por cada grado que baje la temperatura el equipo de aire deberá consumir 8% más de energía.