El importe que por este concepto puede cobrar el técnico equivale a:
-el valor de un cuarto de hora de mano de obra en el caso de los pequeños aparatos de uso doméstico.
-media hora para aparatos de línea blanca (lavadoras, frigoríficos, lavavajillas, etc.).
-una hora si se trata de aparatos de línea marrón (televisores, vídeos, imagen y sonido, etc.).