Con un buen sistema de control y gestión de la energía, basada en un entorno de domótica, podríamos zonificar nuestra vivienda en diferentes zonas de climatización, cada una de ellas con diferentes temperaturas y diferentes horarios de actuación según el estilo de vida de nuestra familia.
De esta forma ahorraríamos una parte muy importante en nuestra factura de la calefacción y el aire acondicionado. Es importante saber que una disminución en 1ºC de temperatura supone un ahorro de combustible del 7%.