Cómo cambiar el timbre de casa

Es aconsejable escoger un timbre dindón, uno de los más sencillos y audibles para hogares corrientes. Además de práctico, es de fácil instalación.Para la instalación del timbre de tu casa necesitarás: cable de cobre, el sencillo de dos hilos,tacos de plástico para atornillar el timbre,grapas especiales para bricolaje, con las que sujetaremos el cable a la pared,tirafondos para atornillar el timbre en los tacos y cinta aislante para envolver los empalmes.
Los pasos a seguir son los siguientes:

1. Con el destornillador, aflojaremos los tornillos de nuestro timbre actual hasta quitar la carcasa que lo protege. Una vez acabado este primer paso, encontraremos dos tornillos dentro del aparato, en los que enlazaremos el nuevo cable de cobre aflojándolos previamente lo necesario. Así, conseguiremos que el nuevo cable alimente de corriente eléctrica al timbre. La medida del cable dependerá de lo lejos que queramos instalar el nuevo timbre.
2. Una vez finalizado este paso, volveremos a colocar la carcasa del timbre primitivo.
3. Para la instalación del cable, con la taladradora y la broca del grosor adecuado haremos los taladros en los tabiques que encontraremos a lo largo del recorrido, hasta la ubicación final. Ceñiremos el cable a las aristas de la pared, y lo sujetaremos con grapas especiales.
4. Una vez grapado todo el recorrido y calculando la medida exacta del cable hasta el nuevo timbre, cortaremos el cable sobrante. De nuevo, con la taladradora, realizaremos dos agujeros para introducir los dos tacos de plástico, en los que encajaremos los tirafondos que sujetarán la base del aparato.
5. Colocamos la base del timbre en el lugar deseado y, sujetándolo con la mano, lo fijamos a la pared atornillando los dos tirafondos en los orificios correspondientes de los tacos.
6. Para finalizar, empalmaremos el cable de cobre a los dos tornillos que encontraremos en el interior del timbre, y encajaremos la carcasa sin necesidad de atornillar, como lo haríamos en un teléfono móvil.

Dónde ubicar la secadora

Algunos modelos permiten colgarlos en la pared y otros se pueden colocar encima de la lavadora (columna lavado – secado). De esta forma se evita trabajo innecesario al no necesitar desplazamientos para llevar la ropa a secar. En cuanto al lugar en que instalar la secadora es recomendable que:

• Sea, preferiblemente un lugar ventilado, con salida de aire al exterior.
• Si se trata de una habitación cerrada, debemos de conectar el tubo de salida desde la secadora al exterior.

Recomendaciones de uso de la secadora

• Consultar etiquetas de la ropa para asegurarse de que se puede secar en la máquina y de las indicaciones a seguir.
• Centrifugar la ropa al máximo permitido.
• Si la máquina no tiene control electrónico utilizar tiempos reducidos para evitar que la ropa se sobrecaliente y se malgaste energía.
• No cargar el tambor en exceso.
• Mezclar la ropa de diferentes tamaños.
• Cuando se sequen prendas grandes, cargar el tambor a la mitad, agrupar las prendas por tejidos.
• No introducir tejidos lavados con disolventes. Atar o sujetar cordones, cremalleras, etc.
• No introducir tejidos plásticos.
• Introducir los jerseys al revés.

El mantenimiento del congelador

Es fundamental mantener las paredes interiores del congelador libres de hielos. Cada vez que se abre el congelador se introduce aire con su correspondiente humedad que cuando entra en contacto con las paredes frías del congelador, se condensa formándose hielo. La capa de hielo que se forma provoca un efecto aislante que impiden la transmisión del frío, de tal manera que es difícil mantener temperaturas bajas de congelación en una nevera en la que se ha formado hielo en las paredes, puesto que la mínima temperatura que alcanzaremos escasamente oscilará entre 0 y -5 ºC. Además de no obtener temperaturas lo suficientemente bajas, éstas se mantendrán a costa de estar el motor del compresor funcionando durante más tiempo de lo normal, con el consiguiente aumento del consumo energético y disminución de la vida útil del congelador.

Cómo ahorrar en el consumo de energía del frigorífico

• Controlar el estado de limpieza en la parte trasera del aparato además de que esté suficientemente ventilada.
• Verificar que las gomas cierren correctamente y no se escape el frío.
• Poner los alimentos previamente fríos, ya que de esta forma se ahorra energía.
• Ajustar el termostato a 6 grados el frigorífico y a -18 en el congelador para equilibrar las temperaturas.
• Previamente descongelar antes que la capa de hielo tenga un grosor de 3 mm, esto genera un ahorro del 30%.