Las estufas de pellets requieren de electricidad para mover los ventiladores, el tornillo de alimentación y también para el encendido inicial. Se pueden programar para que esté funcionando cuando queramos, dispone de termostato que regula la temperatura y es mucho más limpia y eficiente en comparación a la de leña.
Para elegirla debemos tener en cuenta no solo la superficie de la estancia que queremos calentar, sino también muchos otros factores: los aislamientos de la casa, si tiene o no ventanas de doble cristal, la altura de los techos, el uso que se le vaya a dar, etc.